River Plate venció este domingo como local a Boca Juniors por 2-1 en una nueva edición del superclásico del fútbol argentino, disputado ante más de 85.000 espectadores en el estadio Monumental de Buenos Aires. Con goles de Franco Mastantuono y Sebastián Driussi en el primer tiempo, el conjunto «millonario» celebró su segundo triunfo consecutivo frente a su histórico rival desde el regreso de Marcelo Gallardo como entrenador a mediados de 2024.
En una jornada soleada, River mostró autoridad desde el arranque. Dominó la posesión de la pelota y generó las primeras aproximaciones al arco defendido por Agustín Marchesin. La superioridad del local se tradujo en el marcador a los 25 minutos, cuando Mastantuono abrió el marcador con un preciso tiro libre que sorprendió al arquero boquense.
Pese al dominio de River, Boca logró igualar transitoriamente a los 38 minutos con una definición cruzada del uruguayo Miguel Merentiel, tras un pase largo de Lautaro Blanco. Sin embargo, la alegría visitante duró poco: a los 44 minutos, Sebastián Driussi devolvió la ventaja al local tras conectar un centro desde la izquierda enviado por Marcos Acuña.
«Creo que fuimos justos ganadores. En el primer tiempo fuimos muy superiores e hicimos los dos goles. Hoy demostramos la jerarquía en un partido importante», expresó Mastantuono a la prensa luego del encuentro, aún envuelto en los festejos.
En el complemento, River tuvo la chance de ampliar la ventaja a través de Mastantuono, pero el juvenil no pudo concretar. Boca, por su parte, estuvo cerca del empate en dos ocasiones: primero con un disparo desviado de Exequiel Zeballos y luego con dos atajadas fundamentales de Franco Armani ante Lautaro Di Lollo y Ayrton Costa en los minutos finales.
Con este triunfo, River ratifica su buen momento bajo la conducción de Gallardo y sigue consolidando su dominio en los duelos más trascendentes del fútbol argentino.
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