
La Oficina de Prensa de la Santa Sede ha emitido, en la tarde de este domingo 23 de febrero, un nuevo boletín médico sobre el estado de salud del Papa Francisco, quien se encuentra hospitalizado en el Policlínico Gemelli desde el 14 de febrero pasado debido a complicaciones de salud.
Según el parte médico, «el estado del Santo Padre sigue siendo crítico; sin embargo, no ha vuelto a tener crisis respiratorias desde anoche». El Papa ha recibido tratamiento específico en dos unidades de hematología concentrada, lo que ha mostrado beneficios, especialmente en el retorno de los valores de hemoglobina.
En cuanto a su estado general, la trombocitopenia, una afección en la que el número de plaquetas en la sangre es bajo, se ha mantenido estable. Sin embargo, algunos análisis de sangre han revelado una insuficiencia renal inicial, leve, que está siendo monitoreada y controlada por el equipo médico.
El Papa Francisco sigue recibiendo oxigenoterapia de alto flujo a través de cánulas nasales, y se mantiene vigilante y bien orientado. No obstante, los médicos resaltan que la complejidad de su cuadro clínico y la necesidad de tiempo para que los tratamientos farmacológicos hagan efecto mantienen el pronóstico reservado.
A pesar de su delicado estado de salud, esta mañana, en el espacio habilitado para ello en la 10ª planta del hospital, el Santo Padre participó en la celebración de la Santa Misa, acompañado por el personal médico y los cuidados que le asisten en estos días de hospitalización.
La Santa Sede continuará brindando actualizaciones periódicas sobre la salud del Papa Francisco, quien sigue siendo el centro de las oraciones de millones de fieles alrededor del mundo.
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